Arte: Arquitectura como tema para canteros

(Febrero 2012) Muchos de sus trabajos tienen que ver con la arquitectura, dice, y también por esta razón vive en Londres. Al escultor Ekkehard Altenburger le interesan las relaciones de equilibrio entre los edificios y su entorno, o entre construcciones y personas. En „Fallen Arch“, por ejemplo, construye un mini arco del triunfo de mármol y lo deja caer. En „Mirror House“ la silueta de una isla escocesa se dibuja sobre la superficie del espejo.

El camino hasta Londres y hasta esta temática fue largo, como se puede suponer. Altenburger se crió en una granja en una zona apartada, cerca de la frontera entre Alemania y Suiza, y creció rodeado de 10 hermanos. Su primer objetivo fue conseguir un trabajo manual. Realizó un aprendizaje como cantero, se mostró como un trabajador rápido y aplicado, y ya a los veintitantos consiguió el título de „Meister an einer Dombauhütte“ (literalmente: maestro artesano para la construcción de catedrales) en el sur de Alemania. Llegado a este punto, parecía que había alcanzado el punto final de su carrera.

Pero Altenburger había asistido también a cursos en una escuela de arte, y allí el profesor le aconsejó que estudiase, ya que no creía que ser cantero fuese lo más adecuado para él.

Altenburger ya tenía entonces la intención de salir del sur de Alemania, y se matriculó en Bremen, en el norte, en la Facultad de Artes. Fue aceptado mediante el examen especial para alumnos con talento sobresaliente.

Tras 4 años de estudio, parecía haber alcanzado una vez más un punto final en su carrera. Pero, en vez de hace simplemente el examen final, decidió solicitar una beca de la Unión Europea para pasar 2 años en el Edinburgh College of Art, en Escocia, ya que le fascinaba el ambiente de los escultores en Gran Bretaña y también su manera de trabajar la piedra.

Más tarde, consiguió también acabar sus estudios en Bremen y, además, el Master of Art del Chelsea College en Londres.

En su trabajo actual, le ha sido de gran ayuda sus conocimientos como cantero, señala en la conversación, pero en sus proyectos no utiliza sólo piedra.

Desde hace algún tiempo, le interesa especialmente la combinación de materiales con propiedades opuestas, por ejemplo unir la dureza de la piedra con la blandura de la goma.

También ha experimentado con la decoración de superficies: en numerosas ocasiones, ha pintado mármol blanco Estremoz de Portugal con acrílico rojo, por ejemplo en „Close up on pattern“.

Altenburger es miembro de la Royal British Society of Sculptors.

Ekkehard Altenburger

Fotos: Ekkehard Altenburger