Desde Octubre de 2015, los grandes importadores que ingresan más de 36 millones de libras esterlinas deben presentar una declaración sobre las condiciones de trabajo de sus proveedores
Desde octubre de 2015, los grandes importadores británicos deben declarar anualmente que ninguna de las empresas de sus cadena de importación emplea trabajadores en condiciones de esclavitud. La ley, que lleva el título „UK Modern Slavery Act 2015“ e incluye el trabajo infantil, ha sido presentada por el gobierno de David Cameron, tras años de esfuerzos por parte de diversas ONGs y asociaciones
La disposición se aplica sólo a empresas importadoras británicas con ingresos de más de 36 millones de libras al año. Este límite fue considerado adecuado por el 86% de los participantes de una encuesta online.
A pesar de que se trata de un límite alto, la ley ha sido bienvenida sin reservas. Cindy Berman, del Ethical Trading Initiative (ETI): „Va a suponer la necesidad de investigar a fondo la cadena de aprovisionamiento, por lo que se conocerán las verdaderas condiciones de trabajo en cada paso del proceso.“
Al mismo tiempo, señala, no va a ser fácil comprobar todas las ramificaciones de la cadena de aprovisionamiento.
Se habla de „esclavitud moderna“ cuando, por ejemplo, un trabajador ha caído en dependencia económica total de un pez gordo local, y no hay forma de que pueda pagar sus deudas por mucho que trabaje. La relación de dependencia resultante es dramática. Tras un tiempo, sus hijos tienen que trabajar también. A menudo, los padres no tienen más remedio que venderlos porque no los pueden alimentar.
Este proceso se mantiene a sí mismo, y sólo se puede parar cuando intervienen los compradores de los bienes producidos.
El trabajo infantil en la producción de lápidas funerarias fue uno de los grandes temas el ano pasado entre los clientes occidentales. Actualmente, existe un sello que debe garantizar que los niños del país de origen vayan a la escuela, y no a la cantera.
Con la nueva ley británica, se amplía el radio de alcance. El gobierna planea presentar durante el mes de octubre el detalle de lo que debe contener la declaración de los importadores.
La primera de esas declaraciones se recibiría entonces en octubre de 2016.
Algunos casos aislados de esclavitud dentro del mismo Reino Unido levantaron alarma social recientemente. Se trataba, por ejemplo, de empleados del hogar obligados a trabajar bajo condiciones infrahumanas.
Ethical Trading Initiative (ETI)
La empresa británica Marshalls se mostrado especialmente activa en lo que se refiere al control de las condiciones de trabajo de sus proveedores (1, 2).
(08.10.2015)