La artista procede del famoso pueblo pedrero de Colonnata, detrás de Carrara, siguiendo la carretera serpentina
De hecho, no hace falta plantear la cuestión sobre si Chiara Imperiali podría haberse dedicado a algo distinto de trabajar con el mármol. Porque lo ha hecho, puesto que estudió en Milán y Florencia para ser relaciones públicas de productos de moda y joyería. Actualmente, ha conseguido poder aplicar el tema de sus estudios a sus trabajos en piedra y, desde 2011, cuenta con estudio propio donde produce joyería con mármol.
Chiara proviene de la familia propietaria de la empresa Pemart, que gestiona desde hace varias generaciones una cantera de mármol en Colonnata. Esta localidad es el lugar más alto de los pueblos de la piedra que se encuentran alrededor de Carrara, y se llega a través de interminables curvas. El lugar es conocido por el Lardo di Colonnata, un tocino curado en cubas especiales de mármol.
La familia no solo extrae la piedra, sino que también fabrica con ella productos de alta calidad por encargo. Chiara ya ayudaba en el negocio familiar cuando era pequeña, nos escribe: „Yo respiro mármol.“
Aprendió a trabajar la piedra en el estudio de la empresa, y de allí proviene también el trabajo artesanal que es la marca de su producción de joyas.
Por lo tanto, no sería del todo correcto referirse a ella como „diseñadora“, tal y como lo hacemos en el título, ya que fabrica ella misma cada pieza de joyería, desde el principio hasta el final. En la mayoría de casos, se trata de trabajos por encargo.
Sus propias inspiraciones provienen del día a día. „Cuando descubro una forma que me gusta, intento reproducirla en mármol“. Y puede tratarse tanto de letras, como gotas o cuadrados, como muestras nuestras fotos.
Uno de sus principios consiste en mantener el peso de la piedra tan bajo como sea posible. Y por esos sus trabajos resultan filigranas.
La artista, de algo más de treinta años de edad, tiene su atelier en Carrara. Y el nombre de su marca es Marmonìa, una especia de unión de mármol y armonía. Con ello, quiere expresar que el mármol „no es sólo algo pesado y sólido, sino que puede ser también ligero y suave, y modelarse con distintas formas.“
Fotos: Chiara Imperiali
(19.10.2015)