Mercados: Establecer lo que está permitido y lo que no lo está en la industria de la piedra

(Noviembre 2010) Uno de los principios de la actividad económica dice que quien no se implica en la elaboración de las normas se daña a sí mismo. Hacemos referencia a este hecho porque en los Estados Unidos se ha iniciado un proceso que pretende definir los criterios de sostenibilidad de la industria de la piedra. Y no se trata sólo de factores técnicos como el consumo energético en las canteras o las distancias para el transporte. Se trata también de crear normas de „salud humana“ y „sostenibiliad social“ , como se indica expresamente en la presentación del programa en Marmomacc.

En lenguaje llano, esto significa que los estándars que la industria pedrera norteamericana propone para sí misma mostrarán ahora una posición más clara respecto a temas como el trabajo infantil y la carga laboral. Es más, deberán definirse desde un principio de forma que puedan convertirse en normas ISO. También por esta razón, los impulsores americanos han hecho un llamamiento a la colaboración y financiación internacional.

La Natural Stone Council americana (NSC), encargada de la imagen „verde“ del sector en los Estados Unidos, fue la anfitriona del encuentro. También participaron el Marble Institute of America (MIA), la asociación europea Euroroc y la sociedad gestora de la feria Veronafiere. Sus representantes indicaron que la Marmomacc apoya el desarrollo de estándars: „El encuentro podría convertirse en un evento anual en el programa de la feria“.

Esta vez asistieron 30 profesionales interesados, algunos de ellos de la India. Ya el año pasado tuvo lugar un impulso inicial de los estándards, también iniciado por los americanos. En aquel momento, la discusión estaba muy orientada a la práctica, ya que el equipo americano se presentó con conceptos desarrollados y elaboradas presentaciones.

En última instancia, los estándards tratan de la protección del consumidor, algo que juega un papel importante en los hábitos de consumo de la clase media. Cada vez más, ésta expresa su deseo de que los constructores y arquitectos utilicen materiales ecológicos y „correctos“. Las informaciones aparecidas en los medios que hacen referencia al trabajo infantil o al uso de materiales dañinos para la salud en la obtención de granito producen enseguida una gran inseguridad en los consumidores.

Por esta razón, es el momento de definir criterios que indiquen la sostenibilidad de un producto y que se puedan utilizar para otorgar un sello a su fabricante.

Eso sí, no se trata de evaluar los distintos tipos de piedra, haciéndolos competir unos con otros. „Se trata de establecer los criterios por los que preferiblemente deba ser producida la piedra“, se indicó en la feria. Dicho de otra forma: se trata de marcar lo que se debe y lo que no se debe hacer en la producción de la piedra.

Los iniciadores americanos han requerido de forma expresa la participación de otros países en el proceso. Los encargados de la elaboración y desarrollo de los estándards son la empresa americana Ecoform, de la que forma parte Jack Geibig, que ha conseguido renombre como director del Center for Clean Products and Clean Technologies de la Universidad de Tennessee.

Pero también pueden influir especialistas externos, pertenecientes a dos gremios: por un lado, el Core Committee, encargado de supervisar el trabajo de Ecoform; y, por otro lado, el Group of Stakeholders, que aprueba los criterios propuestos.

También participa en el proceso la National Sanitary Foundation (NSF), acreditada por la organización americana de estandarización ANSI para la elaboración de estándards.

Igualmente, está pendiente el desarrollo de un proceso por el cual se determine cómo y por quién pueden ser evaluados los productores de piedra. Tampoco se dispone de un diseño para el sello.

En total, los impulsores cuentan con unos costes sobre los 400.000 USD para el desarrollo de los estándards y del proceso apropiado para la evaluación de las empresas. El plan de aplicación, aceptado por la Ecoform en octubre de 2010, puede durar entre 18 y 21 meses,.

Según indican los americanos, la financiación está asegurada. „Pero para los próximos pasos el Natural Stone Council necesita dinero de todo el mundo“, senala Gary Distelhorst, de la MIA, y hace un llamamiento: „Ayuden a desarrollar estándards que luego puedan usar ustedes también en su negocio“.

Pero, ¿no están intentando los americanos así proteger su mercado y, de paso, el mercado europeo contra la competencia de Asia?

La pregunta está justificada, pero demuestra que quien la hace no conoce realmente el mercado occidental. Ahí, el poder del consumidor es muy elevado, especialmente en la clase media alta, de la que proceden la mayoría de los clientes de la piedra natural. Estos clientes requieren productos „correctos“.

Esto puede sonar a palabras vacías para algunos, y hay muchas palabras vacías en el tema. Pero, los ciudadanos proclaman lo que desean y las iniciativas correspondientes lo utilizan para presionar la política.

Esto significa que si la industria no se provee a sí misma de estándards, estos serán introducidos desde arriba. Y afectarán también a las importaciones, naturalmente. „Se trata de que la industria consiga influencia negociando de forma proactiva“, dice John Mattke, de Cold Spring Granite, también asistente a la reunión.

En Europa también está en marcha un proceso para establecer normativas, iniciado por la Comisión Europea. El objetivo es una Environmental Product Declaration (EPD): en breve, para cualquier material que vaya a ser utilizado para un edificio público, se deberá proporcionar información sobre el coste energético de su producción y otras cuestiones ambientales. No obstante, aquí no se persigue ningún objetivo de tipo social. Euroroc está trabajando en el borrador.

Natural Stone Council

Los interesados en colaborar con los gremios pueden dirigirse a Jack Geibig (Mail)

Euroroc