(Marzo 2013) Antiguamente, aquí los pasajeros tomaban aquí trenes de larga distancia con pomposos nombres como „Empire State Express“ o „Twentieth Century Limited“. Por supuesto, el edificio tenía que construirse con grandes cantidades de piedra natural, como los mármoles Tennessee Pink en el suelo y el italiano Botticino como base en las paredes, así como piedra caliza francesa Pierre de Caen en la parte superior hasta llegar al techo. La Grand Central Terminal de Nueva York, que cumplió 100 años en febrero, es un edificio incomparable en su grandeza y elegancia.
No obstante, eso de la piedra caliza de la Normandía francesa en las paredes, altas como las de una catedral, no es del todo cierto. Las capas alternas de „piedra“ estrechas y anchas son sólo imitaciones y están pintadas sobre el yeso.
De todos modos, por ejemplo el Vanderbuilt Hall, antigua sala de espera, sigue siendo una lugar de elegancia intemporal, con sus bases de Botticino y la falsa Pierre de Caen por encima. Hoy en día, se puede alquilar este lugar para la celebración de eventos privados.
El Botticino se encuentra también en el stand de información en el centro de la nave principal. El pabellón está coronado por una llamativa obra de relojería: „Quedamos en el reloj“, era una frase común entre viajeros de todo el mundo.
Y están además las dos grandes escaleras de la nave principal, también con mármol Botticino, y cuyo modelo es nada menos que la Ópera de París.
Se podrían contar muchas historias relacionadas con la piedra natural en este edificio. Por ejemplo, sobre el suelo de Tennessee Pink: cuando fue renovado en el año 2000, se retomó la producción de este tipo de piedra exclusivamente para este fin. Las juntas entre las nuevas placas son más estrechas (1/16 pulgadas) que las anteriores (1/8 pulgadas); apenas se ve, pero es importante para compensar las vibraciones producidas por el tráfico de los trenes. El Marble Institute of America (MIA) premió la restauración en 2002 con uno de sus Pinnacle Awards.
También se podría hablar sobre los requisitos establecidos para el material utilizado: no están permitidos „materiales que, en opinión del arrendador, sean de baja calidad, no duraderos y/o de mantenimiento complicado“, se indica en un documento con más de 110 páginas. Se acepta expresamente el uso de piedra natural.
En la fachada exterior, la base de la pared está revestida de granito Stony Creek, de Connecticut. En la parte superior se encuentra (auténtica) piedra caliza Bedford, de Indiana.
Aquí se pueden contemplar también impresionantes esculturas, como el grupo que forman Mercurio, Minerva y Hércules.
Y hasta aquí hemos llegado con el tema de la piedra natural. Queremos dedicarle a este bello edificio un par de observaciones más.
La Grand Central Terminal fue construida en el lugar de la antigua Grand Central Station, e inaugurada en 1913. Se trata de una de esas construcciones que marcaron la imagen de Estados Unidos como el país más avanzado del mundo. El concepto está diseñado de forma tan revolucionaria que, hoy en día, utilizan la estación 650 servicios de cercanías, que transportan a unos 200.000 pasajeros. La estación está conectada con la red de metro. Se estima que unas 750.000 personas circulan cada día por esta estación, la segunda atracción más importante de la ciudad.
También causó sensación en su momento el hecho de que se utilizase la entonces nueva tecnología de las locomotoras eléctricas para un nuevo tipo de estación: los andenes se encuentran en el segundo piso subterráneo, y allí, ayer como hoy, se encuentra una ciudad dentro de la ciudad, con exclusivas tiendas, restaurantes y mucho más.
Pero el impulso de la Grand Central no afectó sólo al desarrollo de los transportes. También los movimientos civiles han celebrado aquí algún éxito: en 1967, el edificio fue nombrado patrimonio local, pero la sociedad ferroviaria quería hacer construir un rascacielos en el solar. La iniciativa popular intervino y ganó a Jacqueline Kennedy Onassis para sus representar sus intereses. El conflicto llegó hasta el tribunal supremo, donde se decidió en favor de los ciudadanos en 1978.
Metropolitan Transportation Authority (MTA)
Fotos: Metropolitan Transportation Authority (MTA)