Beatriz Cunha responde a nuestras preguntas „Es en los espacios vacíos donde me encuentro conmigo misma, las formas torcidas, la representación de nuestra evolución como seres conscientes. De ahí surgen las formas torcidas y perforadas, piedra adentro, mirando dentro del cuerpo, en la representación alegórica de los órganos con respecto a la anatomía y, a veces también a la historia del arte o a la música“
„A primera vista, mis obran parecen inspiradas en la naturaleza y, hasta cierto punto, lo están. Pero, en realidad, surgen de una búsqueda interior de respuestas a mis inquietudes sobre la naturaleza humana, la psicología de las relaciones entre naturaleza, espiritualidad y nuestra posición en el universo como seres humanos.“
Comparando lo infinitamente pequeño con lo infinitamente grande, introduciendo en la ecuación el lugar donde pertenecemos y el papel que desempeñamos como especie, en un equilibrio perturbado por nuestra presencia, pero del cual formamos parte.“
El desafío de trabajar con distintos materiales es y ha sido siempre parte del placer que me da mi trabajo. La parte orgánica de mi trabajo también es importante. Me gusta emplear mi energía física para producir las obras, y la elección de la piedra seguramente está relacionada con esto. La piedra es un material que ofrece una gran resistencia, y explorar la forma de ejecutar una idea en ella supone un gran desafío. Un desafío que yo necesito para expresar mis energías creativas, pero también mi energía física.“
Beatriz Cunha es originaria de Lisboa y estudió allí. Ya desde la guardería le gustaba dar forma a los objetos con sus manos, nos escribe. Sus padres permitieron que su creatividad se desarrollase libremente. Una corta estancia en África le enseñó a mirar de una cierta forma a la naturaleza. Su carrera artística comenzó con el diseño de joyas y continuó en los 90′ con la escultura.
Fotos: Beatriz Cunha
(19.03.2014)